Así como los ninjas de la
sabana, hace poco decidimos que también hay un superman. Para nosotros y como
ejemplo vivo de los increíble que es la evolución, éste ejemplo es Clark. Clark
vive en mi ducha y es una rana. Específicamente es –según Google en español –
una rana arborícola dorada. No es dorada así que no confío mucho en Google. En Sudáfrica
las llaman “Foam nest frog” porque ponen sus huevos dentro de un nido que hacen
de especie de espuma. Generalmente estos nidos están hechos sobre cuerpos de
agua – como mi ducha. Para evitarme problemas, yo decidí que Clark es macho
porque se lo ocurra poner ese nido inmundo de baba de huevos en mi ducha y lo evacuo.
Todos sabemos que las ranas
vienen de renacuajos, que vienen de huevos. Pero yo la verdad nunca me había
detenido a pensar en lo increíble que es la metamorfosis. De ser animales acuáticos
y vegetarianos, en cuestión de pocos días, las ranas desarrollan una lengua
pegajosa, patas, pulmones, dientes y un sistema digestivo capaz de digerir proteína
animal. ¡¿Se dan cuenta?!. Es como si de ser una vaquita de agua, pasara a ser
un león en la tierra. Pasa de ser un cosa a ser otra completamente diferente. ¿!Se
dan cuenta que un animal que parece un pececito en cuestión de pocas horas se
transforma en algo completamente diferente, que vive en un ambiente completamente
diferente?! Yo sigo en asombro. Jamás me había detenido a pensarlo y ahora que
lo hice, estoy sorprendida de cómo quitamos importancia a las cosas más obvias,
cuando son las más asombrosas.
A pesar de mi entendimiento
simple de la metamorfosis de una rana porque no tengo ni idea de cómo va el
proceso paso por paso, sigo siendo una joven padawan. Los misterios de la metamorfosis no me han sido revelados
por completo. Algún día quizás lo sean. Por ahora Clark seguirá sufriendo de la
música de Gym Class Heroes cada vez que me ducho. Todos tenemos que pagar la
renta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario